Inventario

Hay amores cobardes que se alejan con el viento
amores sin destino, sin rastros, sin tiempo.
Hay amores de hielo que congelan el alma
y besos en silencio que atraviesan como dagas.

Hay gritos insensatos que descontrolan el alma
y miedos sin pasado golpeando la ventana.
Hay amores que, de locos, se matan por sí solos
y amores como el nuestro...que no escapan, que calan hondo.

¿Qué cara pondrá el tiempo al vernos pasar juntos,
tomados de la mano, amándonos a gritos?
¿Qué dirá el mundo al sentir estos pasos
que de firmes se convierten en huellas y en camino?

Encuentra en tí todo, este futuro alumbrado con tu voz.
Encuentra en tí mi vida la razón para existir.
Viene de tí mi aire, mi risa, mi emoción.
Viene de tí todo...erizas mi alma, me avivas el corazón. 




Una paradoja con corona, cetro y antifaz

Cada vez encontramos más certámenes de belleza. A veces pareciera que la sociedad busca darle una 'corona a todo' . Miss Universo, Miss tierra, Miss Mundo, Miss Turismo... Miss TODO. Hemos caído tan bajo, que ahora estos concurso llegan incluso a niñas que, desde cortísima edad, adquieren una visión de la belleza que no estoy segura de que sea la adecuada. Niñas de 3 o 4 años entrando a cámaras de bronceado y soportando las dolorosas bondades de peinados apretados, depilación, tintes y maquillaje.

Pero, ¿a qué viene todo esto? Sucede que los ecuatorianos tendremos pronto una nueva soberana, pues el certamen de belleza más grande del País se acerca. Y ya ha pasado un tiempo desde que las nuevas aspirantes a la corona empezaron a conoc...perdón,  recorrer el Ecuador. Vemos fotos de las candidatas maravilladas con las bellezas naturales de nuestra tierra, y hasta algunas en las que abrazan a los guagüitos carcosos de algún páramo o suburbio y alegan que son ellos lo más hermoso que han visto en su vida y que los aman desde el primer momento en que los vieron.

Sin intención alguna de perjudicar a terceros, me atrevo a decir que los concursos de belleza son hasta cierto punto una máscara, un antifaz y una aberración maquillada (MUY MAQUILLADA). Ahora, todo se convierte en un desfile de marcas, en una estrategia sucia que tiene como blanco el rostro de una mujer. Marcas de agua, toallas femeninas y hasta electrodomésticos premian a las afortunadas candidatas y las hacen, valga la redundancia, el objeto de un objeto.

No pretendo expresar una radical oposición a este tipo de concursos, sin embargo vale dejar en claro que una corona, una banda o un montón de reconocimientos no sirven de nada cuando el humanismo y la solidaridad son solamente la cara temporal para ser 'Miss'. Emocionante resulta verlas a todas con sus proyectos sociales y bondadosos, pero... ¿se los hubieran planteado sin la estrategia de buscar una corona?
Es vana la pretensión de encontrarse a una Madre Teresa de Calcuta en cada certamen, pero esto se contrapone con una sola verdad: para dejar una huella positiva en la gente, no hace falta enfrascarse en el 90-60-90. Si la mente y el corazón tuvieran medidas 'standard' ya estarían lo suficientemente subvalorados. Créanselo.


¿Roles?

  Hoy tuve que asistir a una reunión con mi hijo porque, a veces, el plan no sucede como estaba pensado. Estuve casi 30 minutos en una sala ...